Por Jorge Joury
Dos imputados estarán en el banquillo, acusados de abusar de la adolescente de 16 años y luego asfixiarla, abandonando su cuerpo en el Parque Pereyra Iraola.
Pasaron diez años de uno de los crímenes más aberrantes de la historia de Florencio Varela. Pero parece que el largo brazo de la justicia está por llegar para Juan Di Gallo, el padre de Natalia la adolescente que fue abusada y murió por asfixia de fosas nasales y boca, en combinación con la compresión que sufrió cuando soportó el peso de los sujetos que la violaron.
En febrero comenzará el juicio para dos imputados por el crimen de la adolescente Natalia Di Gallo, cuyo cadáver fue encontrado hace una década en el parque Pereyra Iraola, en jurisdicción del vecino partido de Berazategui. Para Juan Di Gallo es como empezar a encontrar un poco de luz en el largo camino de la pesadilla que le ha tocado vivir.”Era lo que tanto estábamos esperando y gracias a Dios llegó”, dijo .
Por lo que pudo saber AGENHOY el desarrollo estará a cargo del Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 4 de Quilmes que fijó la primera audiencia para las 9.30 del 7 de febrero de 2014, 10 años y 37 días después del macabro hallazgo del cuerpo de la adolescente de 16 años. El debate será largo. Tal es así, que Daniel Mazzochini, abogado de la familia Di Gallo, informó que el tribunal dispuso 40 jornadas en las que desfilarán más de 200 testigos.
En el banquillo de los acusados estarán Nicolás Gómez, de 28 años y Daniel Feliciano Ojeda, de 45, en tanto que el fiscal de juicio será Claudio Pelayo, el primer instructor que tuvo la causa y que luego fue sucedido por tres colegas distintos.
Los dos individuos están imputados como partícipes de los delitos de “privación ilegal de la libertad agravada por el resultado de muerte en concurso real con de abuso sexual”, aunque el primero de ellos llega al debate preso y el segundo con falta de mérito.
Cuando uno recorre el expediente, surfe que Gómez era el joven que estaba junto a Natalia en su Renault 11 cuando la adolescente desapareció y estuvo detenido entre enero y abril de 2004 y luego fue liberado por falta de pruebas.
Pero la situación de Gómez volvió a complicarse en el 2011, oportunidad en que volvió a quedar detenido tras la declaración de un testigo que presenció cuando la víctima era pasada de un auto a otro por un muchacho con ropas y características fisonómicas similares a las del ahora acusado.
En lo que tiene que ver con Ojeda, era un remisero que primero cayó detenido por el robo de un Peugeot 504 blanco luego señalado por un testigo como el mismo tipo de auto en el que vio a una chica parecida a Natalia pedir auxilio la noche en que desapareció la víctima. Fue en esa instancia cuando Ojeda quedó preso por el crimen de la adolescente aunque en 2005 fue excarcelado también por falta de pruebas.
Para la familia Di Gallo, el remisero siempre fue un “chivo expiatorio” para desligar del caso a Gómez y en 2011 cuando se cerró la instrucción de la causa solicitó su sobreseimiento definitivo pero la Justicia de Garantías de Quilmes no hizo lugar a la solicitud, por lo que Ojeda será sometido a juicio.
Mientras tanto, el abogado Mazzochini, sostiene que enjuiciar a Ojeda va a “complicar” un proceso judicial en el que todavía hay al menos “dos asesinos sueltos”. También dijo que Gómez fue el “entregador” de Natalia a un grupo de hombres que luego violaron y asesinaron a la adolescente, aunque nunca pudo determinarse a ciencia cierta cual fue el escenario del homicidio.
Pasaron diez años de uno de los crímenes más aberrantes de la historia de Florencio Varela. Pero parece que el largo brazo de la justicia está por llegar para Juan Di Gallo, el padre de Natalia la adolescente que fue abusada y murió por asfixia de fosas nasales y boca, en combinación con la compresión que sufrió cuando soportó el peso de los sujetos que la violaron.
En febrero comenzará el juicio para dos imputados por el crimen de la adolescente Natalia Di Gallo, cuyo cadáver fue encontrado hace una década en el parque Pereyra Iraola, en jurisdicción del vecino partido de Berazategui. Para Juan Di Gallo es como empezar a encontrar un poco de luz en el largo camino de la pesadilla que le ha tocado vivir.”Era lo que tanto estábamos esperando y gracias a Dios llegó”, dijo .
Por lo que pudo saber AGENHOY el desarrollo estará a cargo del Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 4 de Quilmes que fijó la primera audiencia para las 9.30 del 7 de febrero de 2014, 10 años y 37 días después del macabro hallazgo del cuerpo de la adolescente de 16 años. El debate será largo. Tal es así, que Daniel Mazzochini, abogado de la familia Di Gallo, informó que el tribunal dispuso 40 jornadas en las que desfilarán más de 200 testigos.
En el banquillo de los acusados estarán Nicolás Gómez, de 28 años y Daniel Feliciano Ojeda, de 45, en tanto que el fiscal de juicio será Claudio Pelayo, el primer instructor que tuvo la causa y que luego fue sucedido por tres colegas distintos.
Los dos individuos están imputados como partícipes de los delitos de “privación ilegal de la libertad agravada por el resultado de muerte en concurso real con de abuso sexual”, aunque el primero de ellos llega al debate preso y el segundo con falta de mérito.
Cuando uno recorre el expediente, surfe que Gómez era el joven que estaba junto a Natalia en su Renault 11 cuando la adolescente desapareció y estuvo detenido entre enero y abril de 2004 y luego fue liberado por falta de pruebas.
Pero la situación de Gómez volvió a complicarse en el 2011, oportunidad en que volvió a quedar detenido tras la declaración de un testigo que presenció cuando la víctima era pasada de un auto a otro por un muchacho con ropas y características fisonómicas similares a las del ahora acusado.
En lo que tiene que ver con Ojeda, era un remisero que primero cayó detenido por el robo de un Peugeot 504 blanco luego señalado por un testigo como el mismo tipo de auto en el que vio a una chica parecida a Natalia pedir auxilio la noche en que desapareció la víctima. Fue en esa instancia cuando Ojeda quedó preso por el crimen de la adolescente aunque en 2005 fue excarcelado también por falta de pruebas.
Para la familia Di Gallo, el remisero siempre fue un “chivo expiatorio” para desligar del caso a Gómez y en 2011 cuando se cerró la instrucción de la causa solicitó su sobreseimiento definitivo pero la Justicia de Garantías de Quilmes no hizo lugar a la solicitud, por lo que Ojeda será sometido a juicio.
Mientras tanto, el abogado Mazzochini, sostiene que enjuiciar a Ojeda va a “complicar” un proceso judicial en el que todavía hay al menos “dos asesinos sueltos”. También dijo que Gómez fue el “entregador” de Natalia a un grupo de hombres que luego violaron y asesinaron a la adolescente, aunque nunca pudo determinarse a ciencia cierta cual fue el escenario del homicidio.
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