Por Jorge Joury
Posibles cambios en el gabinete y algunos retoques en la Economía, son posibles tema de agenda a resolver en el corto plazo. De lo que tendrá que cuidarse por recomendación de los médicos.
Nadie duda de que a partir de hoy el protagonismo de la semana lo tendrá Cristina. El regreso será paulatino y gradual. Y su actividad por ahora se remitirá a recibir a los ministros y secretarios. Pero el frente de especulaciones está abierto y las versiones sobre posibles cambios de gabinete, demás de retoques a la Economía, sobre todo en lo atinente a un eventual desdoblamiento cambiario, como lo señaláramos desde esta columna la semana anterior. El propio ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo, reconoció hace pocas horas que de darse esas modificaciones “son una decisión que le com- pete a la presidenta de la Nación” y aseguró que no sabía “qué tiene pensado” la primera mandataria, en materia de nombres y medidas para cuando regrese a sus funciones.
Las versiones que surgen desde Olivos dan cuenta de que Cristina Kirchner, podría avanzar con nuevas incorporaciones al gabinete y con medidas económicas. Es más, en los pasillos de la Casa Rosada se reavivaron las versiones que indicaban que el gobernador de Entre Ríos, Sergio Urribarri, podría tener un lugar protagónico en el gabinete. No obstante ello, hubo silencio cuando se consultaba oficialmente a los funcionarios. Es que la Presidenta había ordenado el miércoles último a sus principales funcionarios que bajaran el tono por los cambios. Así las cosas, el jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina; el ministro de Defensa, Agustín Rossi, y el diputado Carlos Kunkel negaron modificaciones, luego de que diez días antes ellos mismos habían admitido esa posibilidad.
Algunos señalan que Randazzo también figura como un hombre clave en el futuro esquema del poder. El secretario de Legal y Técnica, Carlos Zannini, quiere armar un grupo de trabajo para equiparar la gestión a media máquina que deberá llevar la Presidenta en los primeros tiempos y conferirle a Randazzo mayor protagonismo. Otra de las mujeres llamada a jugar un rol protagónico en el tiempo que viene, es la actual presidenta del Banco Central, Mercedes Marcó del Pont. Entre varios funcionarios que la vieron en las últimas horas a Cristina en la quinta presidencial, el se- cretario general de la Presidencia, Oscar Parrilli, recibió instrucciones para lo que será el primer acto oficial de reaparición de Cristina. Se supo que la jefa del Estado recibirá a ministros y a funcionarios en la residencia y se mostrará en público mediante imágenes de TV.
Por lo que se sabe, entre las restricciones que le confirieron los médicos, la jefa de Estado tiene prohibido trasladarse por vía aérea, al menos hasta el 9 de diciembre, cuando se le realice una nueva tomografía computada de cerebro. Por ello, el vicepresidente Amado Boudou, a cargo del Poder Ejecutivo, la seguirá representando en los actos fuera de la quinta presidencial.
De aquí en más, algunos funcio- narios definen a la quinta de Olivos, como una “sucursal” de la Casa Rosada. A partir de hoy, Cristina retomará “formalmente” el ejercicio del Poder Ejecutivo, aunque desde hace una semana mantiene diversas conversaciones por teléfono con sus principales ministros. Lo cierto es que durante este período de re- poso y su desaparición de la escena pública, Cristina logró desencadenar mayor empatía en el electorado y recuperó su imagen, que hoy alcanza los mismos niveles de marzo de 2012, con 39,4% de aceptación a nivel nacional, según un estudio exclusivo para el diario PERFIL, publicado ayer y que realizó la consultora en marketing político de Federico González y Cecilia Valladares. Por lo que se ve, Cristina recuperó más de 7 puntos en dos meses.
Sin embargo, la mayoría de los encuestados cree que no regresará con un cambio de estilo. A pesar de que los médicos le indicaron una terapia para reducir el estrés, el 49,7% de los consultados considera que una vez que retome su función lo hará con el mismo estilo que an- tes de la operación, 24,3% que será más confrontativa y el 17% que será más moderada. Entre la especulación y la realidad
Qué no se dijo de Cristina en los últimos días. Algunos sentenciaron que no volvía. Que sus hijos se lo habían recomendado. Que estaba deprimida. Hablan además que retorna a media máquina. Y hasta un consultor que destila perfume mediático como Jorge Giaccobe, se animó a decir “que la gente se olvidó de ella”. Los detractores despiadados del kirchnerismo se apresuraron en mostrar a una jefa de Estado de fin de ciclo. Pero la encuesta que se conoció en las últimas horas sobre una suba de 7 puntos, no parece acompañar mucho esa presunción fogoneada desde varios frentes. Quedó claro que una CFK con problemas de salud es mejor valorada por la sociedad, un fenómeno que tiene muchos antecedentes en nuestra historia reciente y hasta con la propia presidenta, cuando falleció su esposo. Aunque en la reciente elección legislativa no se tradujo en votos, los observadores políticos re- comiendan hacer una lectura fina, observar con cuidado su retorno y no dar por muerta a Cristina. Pese al desgaste de tantos años en el poder y en la transición hacia otro liderazgo, consigue un 40% de imagen positiva. Guste o no, continuará siendo la gran protagonista de los tiempos que vienen y hasta todavía puede dar sorpresas.
Las versiones que surgen desde Olivos dan cuenta de que Cristina Kirchner, podría avanzar con nuevas incorporaciones al gabinete y con medidas económicas. Es más, en los pasillos de la Casa Rosada se reavivaron las versiones que indicaban que el gobernador de Entre Ríos, Sergio Urribarri, podría tener un lugar protagónico en el gabinete. No obstante ello, hubo silencio cuando se consultaba oficialmente a los funcionarios. Es que la Presidenta había ordenado el miércoles último a sus principales funcionarios que bajaran el tono por los cambios. Así las cosas, el jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina; el ministro de Defensa, Agustín Rossi, y el diputado Carlos Kunkel negaron modificaciones, luego de que diez días antes ellos mismos habían admitido esa posibilidad.
Algunos señalan que Randazzo también figura como un hombre clave en el futuro esquema del poder. El secretario de Legal y Técnica, Carlos Zannini, quiere armar un grupo de trabajo para equiparar la gestión a media máquina que deberá llevar la Presidenta en los primeros tiempos y conferirle a Randazzo mayor protagonismo. Otra de las mujeres llamada a jugar un rol protagónico en el tiempo que viene, es la actual presidenta del Banco Central, Mercedes Marcó del Pont. Entre varios funcionarios que la vieron en las últimas horas a Cristina en la quinta presidencial, el se- cretario general de la Presidencia, Oscar Parrilli, recibió instrucciones para lo que será el primer acto oficial de reaparición de Cristina. Se supo que la jefa del Estado recibirá a ministros y a funcionarios en la residencia y se mostrará en público mediante imágenes de TV.
Por lo que se sabe, entre las restricciones que le confirieron los médicos, la jefa de Estado tiene prohibido trasladarse por vía aérea, al menos hasta el 9 de diciembre, cuando se le realice una nueva tomografía computada de cerebro. Por ello, el vicepresidente Amado Boudou, a cargo del Poder Ejecutivo, la seguirá representando en los actos fuera de la quinta presidencial.
De aquí en más, algunos funcio- narios definen a la quinta de Olivos, como una “sucursal” de la Casa Rosada. A partir de hoy, Cristina retomará “formalmente” el ejercicio del Poder Ejecutivo, aunque desde hace una semana mantiene diversas conversaciones por teléfono con sus principales ministros. Lo cierto es que durante este período de re- poso y su desaparición de la escena pública, Cristina logró desencadenar mayor empatía en el electorado y recuperó su imagen, que hoy alcanza los mismos niveles de marzo de 2012, con 39,4% de aceptación a nivel nacional, según un estudio exclusivo para el diario PERFIL, publicado ayer y que realizó la consultora en marketing político de Federico González y Cecilia Valladares. Por lo que se ve, Cristina recuperó más de 7 puntos en dos meses.
Sin embargo, la mayoría de los encuestados cree que no regresará con un cambio de estilo. A pesar de que los médicos le indicaron una terapia para reducir el estrés, el 49,7% de los consultados considera que una vez que retome su función lo hará con el mismo estilo que an- tes de la operación, 24,3% que será más confrontativa y el 17% que será más moderada. Entre la especulación y la realidad
Qué no se dijo de Cristina en los últimos días. Algunos sentenciaron que no volvía. Que sus hijos se lo habían recomendado. Que estaba deprimida. Hablan además que retorna a media máquina. Y hasta un consultor que destila perfume mediático como Jorge Giaccobe, se animó a decir “que la gente se olvidó de ella”. Los detractores despiadados del kirchnerismo se apresuraron en mostrar a una jefa de Estado de fin de ciclo. Pero la encuesta que se conoció en las últimas horas sobre una suba de 7 puntos, no parece acompañar mucho esa presunción fogoneada desde varios frentes. Quedó claro que una CFK con problemas de salud es mejor valorada por la sociedad, un fenómeno que tiene muchos antecedentes en nuestra historia reciente y hasta con la propia presidenta, cuando falleció su esposo. Aunque en la reciente elección legislativa no se tradujo en votos, los observadores políticos re- comiendan hacer una lectura fina, observar con cuidado su retorno y no dar por muerta a Cristina. Pese al desgaste de tantos años en el poder y en la transición hacia otro liderazgo, consigue un 40% de imagen positiva. Guste o no, continuará siendo la gran protagonista de los tiempos que vienen y hasta todavía puede dar sorpresas.
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