martes, 21 de mayo de 2013

La automedicación provoca una muerte cada 23 minutos en la zona Sur y unos 100 mil internados






Por Jorge Joury


Catalina estuvo a punto de morir asfixiada. Era alérgica a la aspirina, pero no lo sabía y la tomaba de vez en cuando. Es que este tipo de los denominados antiplaquetarios, están compuestos por ácido acetil salicico, que provoca una reacción alérgica denominada anasilactica, lo cual puede provocar un edema agudo de glotis, que sino se llega a tiempo al hospital, puede provocar la muerte por asfixia. Afortunadamente a Catalina la asistieron velozmente y hoy puede contarlo:" me intubaron rápidamente, porque tenía la presión por el piso y sentía que me ahogaba. Es desesperante, hasta que me inyectaron un corticoides y me salvaron sobre la hora. Es espantoso, se te tierra la garganta y no pasa el aire. Desde aquella vez, cada medicamento que consumo, es el que me receta el médico".

El testimonio sirve para patentizar las cifras extraídas de un informe de perfil temerario, pero que hay que decirlo con todas las letras, pertenece a la realidad de lo que ocurre en toda la zona Sur y en la mayoría del país: la automedicación provoca una muerte cada 23 minutos. Las cifras están certificadas por el Sindicato Argentino de Farmacéuticos y Bioquímicos y da cuenta que 8 de cada 10 argentinos se automedican y el 50% de la población toma los medicamentos de forma incorrecta, lo que genera alrededor de 60 muertes por día y unas 100 mil internaciones al año.

Tanto Quilmes, como Avellaneda, Lanús, Berazategui y Florencio Varela, están consideradas como "zonas rojas" de la automedicación. Muchas veces esta suerte de "pandemia", como la denominan algunos profesionales de la salud, tiene una raíz cultural, es decir la falta de conocimiento de los efectos nocivos que pueden ejercer estos remedios inadecuados sobre la salud y el extremado afecto a las curas caseras que existe en los barrios.

Eduardo Pérez, presidente del Colegio de Farmacéuticos de Florencio Varela señala que "muchas personas aceptan de manera peligrosa lo que les aconseja un vecino, un compañero de trabajo o se dejan llevar por rumores de que tal o cual medicamento tiene efectos curativos milagrosos y terminan intoxicándose y poniendo en riesgo su vida. Lo correcto sería consultar al médico que es quien debe abordar la patología que no es la misma en todos los pacientes, para encarar la curación con los fármacos más adecuados".

El facultativo, con quien mantuve una rica entrevista en mi programa radial, señaló que" las aspirinas, el paracetamol, el ibuprofeno, el clonazepan y el viagra, se encuentran en la cima de las sustancias farmacológicas que la población utiliza de manera absolutamente descontrolada, como si fueran caramelos, provocando un verdadero problema sanitario".

Si volvemos a los números fríos de la encuesta, nos vamos a encontrar que durante el 2012 fallecieron 22.700 personas, a un promedio de un caso cada 23 minutos.Este se debe al uso o abuso de los medicamentos, mientras que las internaciones superaron las cien mil.

El presidente del Colegio de Farmacéuticos de Florencio Varela, Eduardo Pérez se va metiendo lentamente en la letra fina de la charla y marca con resaltador lo siguiente:" se trata de un problema con una raíz cultural en la población, que tiende a empeorar respecto del mal uso o abuso de diferentes fármacos, no solamente los que se consiguen bajo venta libre, sino también con productos de farmacias con recetas que son mal utilizadas, derivando en serios problemas para la salud".

Eduardo Pérez sostiene que " los argentinos nos convertimos en prescriptores de medicamentos.Padres, amigos, compañeros de trabajo o vecinos, cualquiera deja a médicos y farmacéuticos en segundo plan.Esto hace 50 años no ocurría, pero lamentablemente fueron mutando los patrones de conducta".

Pérez se lamentó de que no hayan campañas mas intensivas para la educación de los consumidores, "se evitarían así ingestas de consecuencias trágicas, como por ejemplo algunos jóvenes que mezclan clonazepan bebiendo alcohol en cantidad, los que lo lleva al coma o directamente a la muerte. Habría que revisar las guardias de los hospitales para ver cuantos casos se detectan durante los fines de semana en las guardias, para darnos cuenta de dónde estamos parados".

A todo esto, en lo que tiene que ver con las internaciones derivadas del mal uso de los medicamentos, el doctor Miguel Esteban, alertó sobre las internaciones derivadas del mal uso de medicamentos, expresando que "a los hospitales y centros de atención llegan pacientes con problemas hepáticos, gástricos y cardíacos que representan un alto costo para el Estado o las obras sociales, al mismo tiempo que causan un deterioro en la salud de las personas involucradas y que podrían ser absolutamente prevenidas".

Los facultativos que elaboraron el dramático relevamiento estadístico de esta nota, coinciden que " en Argentina tenemos más de 60 muertes por día, ya sea por tomar fármacos incorrectos, por no tomar los necesarios o casos de intoxicación que se han dado por comprar en ferias y lugares públicos donde se venden sustancias truchas o vencidas".En el estudio de morbilidad se explica que en alrededor del 50% de los hechos, la muerte se vincula a la denominada "polifarmacia", que es cuando una persona toma de manera simultánea seis medicamentos o más.Esta situación generalmente afecta a personas mayores de 65 años.

Julio César Alonso, presidente del Colegio de Farmacéuticos de La Plata sostiene que "los datos oficiales son ciertos, cuando se señala que un 37,% es lo que se incrementó la facturación farmacéutica durante el tercer trimestre del 2012, con relación al mismo período del año anterior.Y el tema puede relacionarse con la mala costumbre de automedicarse, que existe en nuestro país desde hace años".

En cuanto al uso, a veces excesivo de psicofármacos, Eduardo Pérez señala que "el motivo de esta demanda hay que buscarla en la sociedad.Se vive de manera ansiosa y con una carga violenta que dispara todo tipo de fobias y temores. Ante este cuadro general, es casi lógico que los medicamentos del sistema nervioso sean los que más se vendan".

A todo esto, si comenzamos a recoger explicaciones en el terreno de la psiquiatría, hay quienes aseguran que actualmente hay más acceso a los psicofármacos y muchos medicamentos se consiguen sin recetas."Hoy día hay gente que cree que el Alplax o el Rivotril sirven para dormir, pero en realidad son ansiolíticos. Los recetan una vez y se transforman en un proceso de tipo adictivo porque creen que de otra manera no pueden dormir, por lo que siguen repitiendo equivocadamente esa conducta, como si nada".

La Universidad Maimónides tiene otra visión sobre el tema.Desde su Escuela de Farmacia y Bioquímica, se precisó últimanente que de las 2l.800 muertes, el 50% corresponde a la "polifarmacia". Y aquí subrayan que "esto sucede porque el paciente toma un medicamento que inhibe o potencia la acción de otro y esto pasa porque los médicos no se conectan entre sí o no hacen las preguntas adecuadas al prescribir". Sobre esta cuestión, también coincide el presidente del Colegio de Farmacéuticos de Florencio Varela, Eduardo Pérez.

El dato de esta universidad aún es más grave que el que utilizamos en la cabecera de esta investigación:" en la Argentina, tres de cada cuatro personas se automedican. O sea que la ecuación es más cortita que la de 8 de cada 10". Pero el problema se agrava, si se tiene en cuenta que el mal uso de los medicamentos provoca 100 mil internaciones por año.

Las propias cifras difundidas últimamente por el INDEC y de la SEDRONAR, de hecho arrojaron que más del 10% de las personas de entre 16 y 65 años, el 8% de los universitarios y el 4,4% de los estudiantes secundarios, usan sedantes o estimulantes, sin ninguna prescripción médica..

Es hora de que el "haceme caso, tomá cual o tal cosa, que a mí me hizo bien", le de paso a la racionalidad y a la consulta profesional de los que están capacitados para medicar. Caso contrario, el camino es sin retorno.

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