lunes, 4 de mayo de 2015

Aníbal Fernández, el nuevo alfil de Cristina para el ajedrez bonaerense


Por Jorge Joury

Desde Olivos llegan fuertes rumores de que Cristina cambió de planes en su estrategia electoral para el ajedrez bonaerense. Quiere a lo sumo dos fórmulas para disputar las PASO. Pero además sacará a la cancha a su nuevo alfil, que viene ranqueado por el alto nivel de conocimiento que tiene y se aproxima más a un candidato puro de su riñón. Se trata ni más ni menos, que del locuaz jefe de Gabinete, el quilmeño Aníbal Fernández, que también admitió en las útimas horas que sueña con sentarse en el sillón de Dardo Rocha.
Pero antes, habrá que desmalezar el bosque partidario y contener a los enojados. Algunos tendrán que bajarse y el más apuntado por estas horas es el intendente de La Matanza y actual titular del PJ, Fernando Espinoza, quien habría manifestado su disgusto y estaría buscando apoyo en los alcaldes de la Tercera sección electoral, la más poderosa en recaudación de votos. Acorralado por los rumores, Espinoza salió a contar sus porotos públicamente.”Voy a ser el gobernador de Buenos Aires”, dijo como si nada hubiera pasado y desplegó su perfomance en las últimas elecciones: en 2007 saqué el 52% y el segundo, 16%; en el 2011 obtuve el el 62% y el que me siguió 8%, más de 50 puntos de diferencia y en el 2013 le ganamos a Massa cuando obtuvo el triunfo en Provincia”, enumeró, acaso con la intención de mostrar que el kirchnerismo no puede prescindir de él.
LOS PREFERIDOS DE CFK
Otro que quedaría relegado, pero por no ser del gusto del paladar K, tras sus idas y venidas con el massismo, sería el intendente de Lomas de Zamora, Martín Insaurralde, hoy aliado con el sciolismo. Los preferidos de CFK serían Julián Domínguez, en tándem con Patricio Mussi y Diego Bossio, titular del ANSES, quien se muestra últimamente con el secretario de Seguridad, Sergio Berni.
La instalación del nombre de Aníbal Fernández, en el tablero bonaerense agitó las aguas. Hay quienes aseguran que el funcionario se fijó como plazo los primeros días de mayo para definirse. Desde esta columna, hace unos meses habíamos dado cuenta de que en caso de no mover el amperìmetro a nivel nacional, Anibal se tiraría a la pileta bonaerense. Hoy, pese a que en su entorno nadie se anima a confirmarlo, bajo la carpa de la dirigencia polìtica bonaerense ya lo dan por hecho. El encuestador Germano le reveló en las últimas horas al canal América 24 que midió al quilmeño en la Provincia y le dio 30 puntos. La gente sabe quien es el polémico Aníbal y no necesita instalarse, ni siquiera de la mano de Tinelli.
EN LA VIDRIERA DE SCIOLI
Hay quienes aseguran que con el visto bueno de Cristina, Aníbal se mostrará con Scioli en un evento armado por la fundación DAR que comanda, “Pepe”, el hermano del gobernador. Lo que sabe, es que Anibal habló con Bossio y Domínguez y en un gesto de caballeros, les notificó que se anota para la carrera bonaerense. También habló con intendentes y dirigentes de toda la provincia y empezó, incluso, a preguntar si estarían dispuestos a colaborar con tropa e insumos para un eventual lanzamiento en La Plata.
La zambullida del jefe de Gabinete, opera como fronting para otra apuesta: que La Cámpora, que no asume como propio a ninguno de los doce anotados para suceder a Scioli, pueda colonizar parte de la burocracia bonaerense y coloque un vicegobernador. “Si sacás a Insaurralde, Aníbal es el que más mide”, apunta un dirigente que empuja desde el sigilo, la postulación del hombre de los prominentes bigotes. Otros aseguran que con Aníbal en la cancha, Cristina se asegura el destierro definitivo del alcalde de Lomas de Zamora.
LAS PRIMERAS SEÑALES
Otro dato a tener en cuenta es que Fernández viene elogiando a Daniel Scioli, con quien teje una alianza cada día más fuerte, en un sugestivo gesto de su intención por sucederlo. “Yo tengo mucho cariño y una excelente relación con Scioli, que todos conocen y no lo he ocultado nunca”, dice.
En los pasillos de la Casa Rosada aseguran que el jefe de Gabinete cuenta con avales de peso. El diputado provincial José Ottavis, integrante de la mesa de conducción de La Cámpora y uno de los emisarios del Gobierno en el armado electoral, junto con el secretario general de la organización, Andrés Larroque, y el secretario general de la Presidencia, Eduardo “Wado” De Pedro, son sus garantes para dar la madre de todas las batallas.
En la gobernación festejan. Primero la reciente foto con Cristina en un gesto triunfal con Scioli, una señal inequívoca de la buena sintonía con la Casa Rosada. Luego las encuestas , en donde el motonauta aparece primero en todas. Y ahora, con la decisión de Aníbal se va despejando el bosque para la pelea nacional, en la que Scioli concentra el mayor consenso dentro del peronismo. Por el momento siguen en la grilla Florencio Randazzo, que promete no bajarse por nada y el gobernador de Entre Ríos, Sergio Urribarri. Un escalón más abajo, aunque con menos posicionamiento, se ubican el ministro de Defensa, Agustín Rossi y el ex canciller Jorge Taiana.
DEMASIADOS CACIQUES
Pero el territorio bonarense está demasiado poblado de inquilinos que quieren tomar ubicación en la residencia de la calle 6 . De la mano de Cristina, en los últimos tiempos se sumó al nutrido pelotón el presidente de la Cámara de Diputados, Julián Domínguez, quien viene construyendo mucho apoyo polìtico y gremial a paso firme. En la trastienda del Pj bonaerense se da como segura una fórmula de éste con el intendente de Berazategui, Patricio Mussi, aunque el jefe comunal les avisó a los suyos que por ahora sigue en carrera por el primer lugar. Los dos cuentan con viento a favor, ya que son apadrinados por el ministro de Infraestructura, Julio De Vido.
Por otro lado se muestran juntos Diego Bossio y Sergio Berni, que lanzó en los últimos días una pegatina de afiches con su campaña, diciendo que “puede”. Además están en carrera Carlos Castagnetto, cobijado por Alicia Kirchner, el vicegobernador Gabriel Mariotto, y Fernando “Chino” Navarro.
En el Gobierno crece la idea de achicar la cantidad de fórmulas, aunque sin dejar de contener a todos los sectores, por lo que también tendría su lugar Martín Sabbatella, de Nuevo Encuentro. Los últimos dos postulantes son Martín Insaurralde, intendente de Lomas de Zamora, y Fernando Espinoza, de La Matanza. Para ambos, en la Casa Rosada imaginan un destino en sus respectivos distritos. Más aún para el presidente del PJ provincial, de quien dependen para garantizar un holgado porcentaje de votos en el municipio más poblado del conurbano y uno de los bastiones del kirchnerismo. Ambos dirigentes son además, las cartas de Scioli en caso de una tensa negociación con Cristina. El posible desembarco de Aníbal es visto como otra maniobra de Cristina para agregarle una cuota de suspenso a las PASO bonaerense, además de sostener su poder de gran electora. Lo que si es seguro, que Buenos Aires una vez más se convertirá en el planeta más codiciado del firmamento K.

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