Por Jorge Joury
Nadie dudaría que el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, es la voz oficial de Cristina. Es el hombre que pasa en limpio los deberes que la Presidenta le ordena. Por eso llamó la atención la dureza que empleó contra el vicepresidente de la Nación, Amado Boudou al reclamarle que señale a los funcionarios que filtran información a los medios sobre la causa Ciccone. En su martes negro, Capitanich también subió a la cresta de la ola al gobernador Daniel Scioli por participar de un evento organizado por el Grupo Clarín. Lo hizo con la frase : “dime con quien andas y te diré quien eres”. Ambos frentes de tormenta, a criterio de los observadores, no hacen otra cosa que dejar al descubierto la existencia de un interna fuerte en la cúspide del poder.
El gobernador Scioli y el CEO del Grupo Clarín, Héctor Magnetto, fueron observados por el arco polìtico presente, conversar amablemente. Ello le valió la frase de Capitanich: “Dime con quién andas y te diré quién eres”. Scioli estuvo en el encuentro que se desarrolló en el Museo Malba, acompañado por su hermano, “Pepe”, por el asesor Gustavo Ferrari y por el titular del Banco Provincia, Gustavo Marangoni. Precisamente este último fue el que tomó el guante y salió con los tapones de punta contra Capitanich.
“No hay que pedir permiso para saludar a la gente”, sentenció Marangoni y agregó que el gobernador “habla con todos” porque “es un principio de la democracia”, pero eso “no significa que tenga que estar de acuerdo”.
“Si hay que explicar esto estamos en un ámbito de retroceso”, consideró el banquero, y opinó que “intercambiar opiniones no puede ser presentado como una conducta sospechosa”. “Si alguno tiene alguna duda, que mire la trayectoria de Daniel y vea con quién estuvo”, enfatizó.
ESPERABAN MISILES Y NO SE EQUIVOCARON
En La Plata sabían que el cachetazo contra el ex motonauta vendría en cualquier momento. En la nueva estrategia de campaña Scioli está tratando de diferenciarse del gobierno nacional. Primero lo hizo al presentar su proyecto económico con Blejer y Bein y luego al concurrir al convite del máximo enemigo de CFK: el Grupo Clarin. “Daniel sabe que ha sido fiel al gobierno y ya no se va a callar. Cuando reciba ataques, contestará a través de sus espadas”, contó en voz baja un informantE.
En cuanto a “los machos en off” a los que aludió Boudou, una calificada fuente dijo que “no es una novedad. Hay que remontarse a los tiempos de Guillermo Moreno, quien definía al vice como un vago que se la creyó, pero que no sabe actuar frente a los empresarios”. En los pasillos de la Rosada también se murmura que otro con quien Boudou mantiene viejas cuitas, es Juan Carlos Pezoa, secretario de Hacienda, uno de los hombres de confianza de Kirchner. El vicepresidente ve su mano en las declaraciones que obran en la causa cuando se menciona un freno al plan de modernización de la Casa de la Moneda, lo que permitió el ingreso de “The Old Fund”.
HAY VIEJOS ODIOS Y RENCORES DE POR MEDIO
Otro de los focalizados por el vice, es el titular de la AFIP, Ricardo Echegaray, uno de los primeros en desligarse públicamente de los trámites administrativos del caso Ciccone. Pero hay quienes aseguran que los destinatarios políticos del “telegrama” de Boudou, fueron Florencio Randazzo y Daniel Scioli, dos precandidatos presidenciales del oficialismo. El aviso cañonazo para ambos coincide con la llegada de la última encuesta de la consultora de Raúl Aragón & Asociados que revela un dato muy significativo. Tiene que ver con que una interna en el Frente Para la Victoria hoy se polariza entre los dos precandidatos: Scioli con el 11, 04% y el ministro del Interior con el 9,42%, lo que deja como conclusión un virtual empate técnico.
Retornando al mundo de las inquinas que planteó Boudou, ya es público en los pasillos del poder que el vice y Echegaray se odian.Por eso nadie, ni el propio Echegaray se sorprendió que lo salpicara en su declaración. Una fuente confiable señaló que la rivalidad entre ambos funcionarios data de la época en que vivían en Mar del Plata y militaban en la juventud de la UCEDE. “Nunca se pudieron ver y tampoco ocultaron su rivalidad”, aclaró un vocero digno de crédito.
PIEZA CLAVE, CON MAS PODER QUE LA SIDE
Sin embargo lo que se comenta es que “tanto Boudou como Echegaray cuentan con el respaldo de Cristina. Al titular de la AFIP no lo quiere nadie en el Gobierno, ni la vieja guardia, ni La Cámpora.Pero la Presidenta lo banca porque la información que tiene en sus manos lo hace más poderoso de la SIDE”.
Aunque no lo diga con nombre y apellido, comentan que Boudou a Randazzo no le perdona el haber hablado con periodistas en los inicios del caso Ciccone y de haber deslizado alguna intimidad de palacio sobre el tema. Y en lo que tiene que ver con Scioli, el vice lo metió en la causa al preguntar concretamente al juez Ariel Lijo sobre la suerte de Carlos Gabella, hombre de la firma Boldt, dedicada a los casinos y bingos y que fuera asesor de Scioli en 1997, hace 17 años. Pero en la Gobernación, la acusación no hizo ni siquiera cosquillas. En el sciolismo señalaron que “no hay nada que ocultar.Gabella era militante del Pj porteño, donde ocupó diferentes cargos. Boudou ve fantasmas. Que encienda el ventilador que lo esperamos tranquilos”, se dijo.
Y POR SI FUERA POCO, A LAS TABLAS
Encima el vice también se va a ganar las tapas de las revistas del corazón.”Sí, salí con Amado Boudou. Hace treinta y pico de años atrás. Le decían ‘Eme’. Fue en Mar del Plata cuando yo tenía 18 años, 19, o más de 21. Era disc jockey en un boliche”, recordó la actriz Reina Reech en las últimas horas, al ser entrevistada en el programa “Intrusos”.
Reina lo había olvidado por completo y nunca relacionó a su ex pareja con el político, hasta que le hicieron acordar: “Este verano cuando voy a comer en Mar del Plata, me encuentro con amigos de esa época y me dicen lo negaste en una entrevista’. ¿No te acordás que tal verano saliste con él? No lo relacioné, no me acordaba”.
“Era un churro divino. Yo había empezado mi carrera, no era famosa como para que me persigan. Tampoco fue una relación, salí 7 u 8 veces. Era algo olvidado, de los 20 años. Era DJ, me iba a la cabina, él es más chico que yo y no sé, me gustó. Está muy cambiado, era flaquito y tenía el pelo morocho con rulos. Hoy no me parece churro, hoy me dan ganas de salir corriendo”, afirmó la artista, en clara referencia al difícil momento judicial que atraviesa el político.
No es un buen momento para Boudou. Por el lado de Balcarce 50 se comenta que hay otros hombres fuertes del cristinismo que lo ven como “una piedra en el zapato”. Es el caso de Carlos Zannini, el secretario Legal y Técnico y mano derecha de Cristina y su hijo Máximo. Qué hacer con Boudou es un tema de debate en la trastienda de los ministros. Se dice que uno de ellos, el más presidenciable, mostró recientemente su enojo en una reunión con pares, marcando que las sospechas sobre el vice “empañan todo lo bueno que se hace y eso nos puede jugar en contra en el 2015″.¿Llegará la sangre al río y le soltarán la mano?
No hay comentarios:
Publicar un comentario