Por Jorge Joury
Si algo hay que reconocerle a Daniel Scioli, es su obstinación por no dejar abrumarse por los palos en la rueda que recibe desde varios frentes. Después de descomprimir el rumor de la posible fuga de Martín Insaurralde hacia el Frente Renovador, el gobernador ahora compró otro problema. Redobló su apuesta mediática y salió a responderle al grupo de intelectuales K, entre los que se destaca el filósofo Ricardo Forster, que expresó un rotundo rechazo hacia la figura del ex motonauta, al expresar que “sería peligroso” una posible postulación suya dentro del kirchnerísmo. “Y bueno, ahora cuando tengamos un poco de tiempo será bueno hacer una carta abierta a Carta Abierta para enumerar logros de gestión, sin ánimo de tomarlo como una ofensa”, afirmó el mandatario bonaerense. Y agregó: “Qué bueno sería que hagamos un resumen de lo que hicimos en la Provincia para desendeudarla, transmitirle la mayor coparticipación a los municipios, haber ordenado al Banco Provincia”.
Scioli sabe que no puede mostrar debilidad frente al embate del núcleo más duro del ejército K. Sería como reconocer que en algo aciertan. Por eso aseguró que el colectivo de intelectuales, que en su último encuentro en la Biblioteca Nacional rechazó su postulación para 2015, lo critica porque desconocen su gestión. “Yo hago a mi manera, pero ejecuto y fruto de todo eso, es que hemos puesto a la Provincia en un buen lugar”.Seguramente el mandatario bonaerense recibirá telegrama de respuesta en las próximas horas. Pero sin rozar siquiera a Cristina, encontró la manera de diferenciarse. Es lo que buscan sus primeras espadas, que le aconsejan no salir del escenario de los títulos de las noticias, para no dejarle espacio a su contrincante más temido: Sergio Massa.
LA OLA NARANJA EN EL MUNDIAL 2014
En el laboratorio de ideas de campaña en la Gobernación, se trabaja a full las 24 horas. Los gurúes aseguran que la llave maestra contra Massa está en mostrar gestión, tiñiendo lo menos posible de proselitismo el escenario preelectoral, ya que se sostiene que “hoy la gente está enojada con los políticos, falta mucho para las elecciones del 2015 y todavía la situación se puede revertir”. Scioli es el más atado a los destinos de Cristina Fernández. De lo que haga bien o mal la presidente, la onda expansiva puede tocarlo. Es por ello que sus movimientos tienen que ser cuidadosos, para no despertar suspicacias. En eso Scioli ha demostrado ser “un sobreviviente del Titanic, porque se aguantó todas las trompadas, las de Néstor en su momento como vice, las de Cristina hoy y las del núcleo más ortodoxo K”, señaló uno de sus asesores.
El próximo objetivo de la usina mediática sciolista, es el Mundial Brasil 2014, siempre rogando y con el mazo dando en que le vaya bien al equipo nacional. Se trabaja a destajo, para ver de que manera se puede calzar un gol de media cancha, un tiro por elevación. O aunque más no sea, dejar picando una buena idea en la opinión pública. Algunos publicistas planean hacerlo subliminalmente, poniendo más de relieve la acción de gobierno, por sobre las promesas de los opositores que buscan llegar al corazón celeste y blanco con luces de bengala.
“Vamos a desterrar el mito de que falta gestión en la provincia de Buenos Aires”, afirman las primeras espadas de Daniel Scioli. “Gobernar la Provincia es como gobernar un país, no se puede comparar con la Ciudad, ni con Tigre”, destacan, con la mirada puesta en los dirigentes del Pro y del Frente Renovador que arrojan sus dardos de manera permanente contra el gobernador. Lo que se comenta en los pasillos de la Gobernación, es que la campaña fue pergeñada por el tándem Juan Courel, secretario de Medios y el publicista Ernesto Savaglio, el creativo que Scioli arrebató a Massa, en una jugada de ajedrez.
SIN QUE SE HABLE DE ELECCIONES ES LA ESTRATEGIA
Con las encuestas que los colocan al tope de la pelea por la sucesión en el Sillón de Rivadavia, Sergio Massa, Daniel Scioli y Mauricio Macri buscan marcar diferencias entre ellos para posicionarse de mejor manera en el electorado. Como en el ajedrez, la jugada de uno obliga a repensar las de los otros y así se mueve el tablero.
En las últimas semanas, el Frente Renovador y el PRO han cargado contra la administración provincial con el mismo dardo: no hay gestión. Pero lejos de incomodarse, en La Plata ven la oportunidad de pasar al frente de la pelea contrastando esa acusación.
Para desterrar la crítica opositora que califican de “mito”, Savaglio y el secretario de Comunicación de la Provincia, Juan Courel, recomendaron al equipo del gobernador concentrar los mensajes tanto publicitarios como en redes sociales a los problemas cotidianos. “La sociedad está mirando para otro lado, no quiere que le hablen de elecciones, y a diferencia de Massa, Daniel puede mostrarse gobernando sin necesidad de hacer campaña política”, argumentan.
Además de la publicidad, confían en cosechar el redito de la inauguración de varias obras que llevaron adelante en los últimos años: parques industriales, las unidades de pronta atención, el hospital Balestrini, las escuelas técnicas, el Estadio Único, el museo MAR, el tercer carril de la autopista Buenos Aires – La Plata, la renovación de la ruta 6 y el nuevo puerto de La Plata. También confían en que rendirán frutos las medidas en torno a la seguridad -como el aumento en el número de patrulleros y el récord de secuestros de armas y drogas- y los microcréditos del Banco Provincia.
LA CONFLICTIVIDAD SOCIAL EN LA CRESTA DE LA OLA
No obstante estas acciones, los mosqueteros sciolistas saben que la conflictividad social ante la falta de recursos, les pueden traer un dolor de cabeza. Escuelas que se caen a pedazos por la falta de mantenimiento, carencia de alimentos en los comedores, insumos básicos que brillan por su ausencia en los hospitales, así como futuras demandas salariales, principalmente de los maestros, son cuestiones que desvelan al gobernador. Encima en las últimas horas desde el Ministerio de Salud tuvieron que arreglar en tiempo récord las calderas del Hospital de Niños de La Plata, para apagar el fuego en la tapa de los diarios. Scioli tiene dos batallas por dirimir. Una hacia dentro de su propio partido. Y la otra contra sus opositores. Por el lado de la Presidenta, es la que se encarga de fomentar precandidatos que brotan como hongos.
EL HURACAN RANDAZZO VIENE CON VIENTO A FAVOR
El más peligroso de ellos es Florencio Randazzo, el que mide mejor en las encuestas y paradójicamente también muestra gestión. Cristina ha empezado a levantarle el telón con frecuencia, ya que en menos de una semana compartió dos actos con el ministro de Interior y Transporte. El dirigente de Chivilcoy, que ayer impactó con la celeridad en obtener DNI, hoy le permite participar de la “revolución ferroviaria”, sintetizada por ahora en la compra de trenes chinos que deberán circular sobre rieles destartalados y con óxido centenario.
No obstante, la Presidenta sabe también equilibrar la balanza, porque todavía falta mucho para la contienda electoral. El mismo día en que se mostró con los trenes chinos y Randazzo, se corrió hasta Don Torcuato donde inauguró con Jualián Domínguez, un policlínico de SMATA.
Randazzo ya mandó telegrama de aviso de que sólo competirá por la candidatura presidencial en la interna del FPV. Domínguez no cerró la puerta, según soplen los vientos, a una postulación para la gobernación de Buenos Aires. El ministro del Interior y Transporte se envalentonó definitivamente después de una encuesta difundida por la consultora de Raúl Aragón, que lo ubicó apenas dos puntos por debajo de Scioli en una hipotética interna del FPV.
DE CONSTITUCION A LA PLATA POR UNA VIA TOP
Randazzo hoy torea a Scioli, envalentonado por el aliento de Cristina. Lo hizo al ausentarse de la cumbre del PJ en Los Toldos. El ministro justificó el faltazo, con el argumento de estar ocupado con el conflicto en el Sarmiento. Pero aquellos que leen bajo el agua descubrieron otras razones.El objetivo es no aparecer compartiendo mucho cartel con el gobernador. Tampoco le atrae exhibirse junto a Domínguez, a quien consideraría un advenedizo en la puja presidencial. Randazzo es oriundo de Chivilcoy y Domínguez, de Chacabuco. Transitan e influyen en el mismo campo de batalla, la Cuarta Sección electoral. Y otro golpe de efecto que le nubló la sonrisa tanto a Scioli como a Domínguez,, fue que las calles de ingreso a Los Toldos estuvieron invadidas con pancartas de una sola inscripción: “Randazzo 2015”.
Como se observa, el camino de Scioli hacia la Casa Rosada, es espinoso. Su gestión en Buenos Aires ofrece muchos frentes conflictivos y los esfuerzos, por el momento, no reditúan el capital esperado. El gobernador informó que desde que declaró la emergencia por la inseguridad se realizaron 18 procedimientos que sirvieron para aclarar 13 mil delitos. Pero el clima social, en ese aspecto, no varió. El ministro de Seguridad, Alejandro Granados, batalla contra la burocracia estatal para sumar un millar de patrulleros a las calles bonaerenses. Pero ese trámite resulta lento e irritante frente a las urgencias populares. Mientras tanto, Randazzo manda sus misiles por elevación. Frente al grave déficit ferroviario, instaló un servicio de tren preferencial hacia La Plata, auspiciado por su ministerio. Tiene cuatro frecuencias diarias, un costo de 16 pesos, pero con condiciones casi de lujo, que nada tienen que ver con los cotidianos padecimientos argentinos.Por ahora lo llaman “el tren de los ricos”, porque en esas formaciones, entre varias cosas distintas, no viajan personas paradas . ¿Y si mañana se le ocurre el mismo servicio para los pobres? Mejor ni pensar en cual estación pueden llegar a parar las aspiraciones de Scioli.
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