Por Jorge Joury
El clima político en la provincia de Buenos Aires hierve a fuego lento en los principales campamentos. Lanzamientos, componendas y cambios de frente en el tablero electoral, por estas horas han comenzado a ser moneda corriente, con el común denominador de tensiones de por medio. Por el lado del peronismo, con un Martín Insaurralde cada vez más cerca del FR, el gobernador Scioli ha decidido patear el tablero y empezar a promocionar a su nuevo delfín, el intendente de La Matanza, Fernando Espinoza. Hay hasta quienes indican que ya le tiene preparado un ministerio -sería el de Gobierno- para que haga base en los meses previos a la interna. A pesar que de Espinoza hay carteles hasta en Pinamar, promocionando su candidatura, es escaso el nivel de conocimiento en la gente, por lo que el sciolismo tendrá que remar fuerte para instalarlo.
La tensa y fría relación entre Daniel Scioli y el diputado nacional Martín Insaurralde, volvió a patentizarse en las últimas horas. Fue durante el lanzamiento de una mesa política en Lomas de Zamora en apoyo a la candidatura presidencial del mandatario bonaerense. Como reflejo de la decisión de Scioli de empujar una posible postulación para sucederlo del matancero Espinoza, Insaurralde, quien también aspira a ser gobernador, no sólo no concurrió a la cita sino que, además, habría ordenado al intendente Santiago Carasatorre darle la espalda a la movida.
UNA SEÑAL INEQUIVOCA DE LA TENSION
La presencia de Carasatorre había sido anunciada por los organizadores, pero a último momento se excusó porque, según se dijo, debía participar de un encuentro del Acumar, el ente vinculado al saneamiento de la cuenca Matanza-Riachuelo. El culebrón alrededor del acto articulado por el grupo Descartes que lidera el ministro de Trabajo Oscar Cuartango, no hace más que transparentar que la relación entre Scioli e Insaurralde, que viene amagando con pegar el portazo del Frente para la Victoria para irse con Sergio Massa, pasa por un momento de fuerte tirantez.
Lo que se comenta en Lomas, es que Insaurralde expresó a sus dirigentes más cercanos, su “enojo” con Scioli tras la visita que realizó esta semana al distrito de La Matanza donde, tras firmar la adhesión a la Policía local, el gobernador expresó su apoyo a la candidatura del intendente Fernando Espinoza -titular del PJ bonaerense- a sucederlo.
No sólo eso: fuentes del sciolismo hablan de la posibilidad de que Espinoza se sume al gabinete provincial, movida que apunta a mitigar los efectos de la posible salida de Insaurralde rumbo al massismo y ensayar un operativo contención sobre otros intendentes que pudieran verse tentados de adoptar el mismo camino que el ex alcalde de Lomas de Zamora.
EN EL CAMPAMENTO DEL FRENTE RENOVADOR
También por el lado del Frente Renovador soplan vientos de tormenta. No es para menos, mientras tiene que hacer frente a las intrigas sobre el supuesto pase de Martín Insaurralde al massismo, que complica su candidatura a la gobernación, el diputado Darío Giustozzi debe ponerle el pecho también una tormenta en Almirante Brown, su pago chico. Luego de acumular críticas por ocupar desde diciembre de 2013 su banca en el Congreso y a la vez mantenerse de licencia como intendente, Giustozzi presentó por segunda vez su renuncia al cargo municipal, tal como se lo venía reclamando su jefe, Sergio Massa.
Giustozzi ya había presentado una renuncia en diciembre, pero fue rechazada por sus propios ediles, que son amplia mayoría en el recinto. Cerca del intendente sostienen que esa jugada buscó proteger a su reemplazante interino, Daniel Bolettieri, de una interna de poder para disputarle el cargo. Lo que también se comentaba que, en los hechos, la licencia también le ofrecía un resguardo a Giustozzi para volver al municipio si no prosperaba su candidatura a gobernador. Y para mantener ordenada a su tropa.
Y como si fuera poco, en el medio de esa complicada situación, el diputado fue denunciado penalmente por la publicidad del municipio que se difundió durante el Mundial de fútbol y que ponía en primer plano su rostro, pese a que hacía meses que estaba de licencia. La denuncia cayó en el juzgado de Norberto Oyarbide. Bolletieri responsabilizó por esa denuncia al referente local del sciolismo, Mariano Cascallares, y, de paso, lo acusó de cobrar doble salario como concejal y como titular del Instituto de Previsión Social (IPS) bonaerense.
Cascallares negó tener algo que ver con la denuncia penal a Giustozzi y desmintió a Bolletieri, al afirmar que renunció a su sueldo de concejal en diciembre pasado y que tampoco cobra dedicación exclusiva por su cargo en el IPS. “Buscan tapar los desmanejos en el municipio”, remarcó y devolvió la pelota al campo enemigo.
Pero la buena noticia para el sciolismo, fue que el intendente de Almirante Brown, Daniel Bolettieri anuncio en el acto del aniversario de Burzaco que el municipio adherirá al plan de policia Local. Bolettieri apuntó a la cuestión numérica y resaltó el beneficio de más de 500 nuevos policías que podrán sumarse producto del acuerdo. Según contó, llegó a un acuerdo tras una reunión con la ministra de Gobierno, Cristina Álvarez Rodríguez.
Si bien Massa había dado la venia para que los alcaldes del Frente Renovador firmaran el convenio, no fue del todo contundente y dejó la puerta abierta a que varios municipios sigan manteniendo reparos. De hecho, el Gobernador ha utilizado casi como un latiguillo el pedido a los municipios massistas pra que sumen la flamante fuerza y no pongan reparos políticos.
ENTRE UNEN Y EL PRO SE DISPERSAN EN INTRIGAS
Mientras esto acontece en los campamentos del peronismo, entre los funcioarios destinados al armado de la candidatura de Macri, el tsunami desatado por Carrió contra Pino Solanas no fue mal recibido, porque a su criterio evidencia que su jefe político está bien parado en el podio de los presidenciables junto a Sergio Massa y a Daniel Scioli. Deslizan además que la alianza UNEN llegará “deshilachada a fin de año”. De ocurrir esto, una parte de sus dirigentes podrían optar por acercarse al PRO a comienzos de 2015, lo que les daría tiempo para empalmar la oferta electoral.
Pero para los observadores políticos, la contracara de este razonamiento residiría en la provincia de Buenos Aires, donde el PRO aún no logra hacer pie con una candidatura fuerte a la Gobernación. De hecho, tanto la vicejefa María Eugenia Vidal como el intendente de Vicente López, Jorge Macri, miden debajo de los diez puntos de intención de voto, contra un promedio de 15% que ostenta la líder del GEN, Margarita Stolbizer.
A sabiendas de que el macrismo aún no da en la tecla en la Provincia, Francisco de Narváez reapareció en los últimos días con la definición de que no será candidato en la interna del Frente para la Victoria, con lo cual descartó una alianza con el gobernador Scioli a menos que éste deje las filas del kirchnerismo. La propia Carrió había coqueteado alguna vez con postularse en territorio bonaerense, pero se sigue reivindicando chaqueña y por eso no representaría a otro distrito. De hecho, nunca se candidateó para el Gobierno porteño ni para la senaduría por la Capital, sino siempre para la Cámara de Diputados, porque considera que así representa al conjunto de la sociedad argentina y no solamente a una jurisdicción. Más afincados a la cuestión territorial parecen Cobos y Binner, quienes vienen de ganar las elecciones legislativas en Mendoza y Santa Fe -respectivamente- y fueron gobernadores de esas provincias, de las más importantes del país.
UN HUEVO QUE PUSO PRIMERA
El primero que salió al ruedo en FaUNEN en las últimas horas, fue el referente de Libres del Sur, Jorge “Huevo” Ceballos.El matancero y ex funcionario kirchnerista, lanzó su precandidatura a gobernador bonaerense por el Frente Amplio UNEN con un acto en la localidad de San Martín, en el que disparó a la cabeza de la diputada Elisa Carrió por su intención de ampliar el frente con el PRO de Mauricio Macri. Lo hizo por supuesto con la venia de su jefe, Pino Solanas, presente en el lanzamiento. Ceballos, el primer postulante del sector en formalizar sus aspiraciones en la provincia, encabezó un acto en el Centro Miguelete, acompañado por Fernando “Pino” Solanas, Ricardo Alfonsín, Miguel Bazze, Alfredo Lazzaretti, Mario Cafiero, Victoria Donda y Humberto Tumini, entre otros.
“Cuando Carrió y sus amigos, para justificar un acuerdo con Macri, ponen como único argumento que debemos ganarle a los K sin decir nada acerca de cuál es el proyecto con el que vamos a gobernar, sospecho que son buenos alumnos de Menem cuando sinceró que si decía lo que iba a hacer en la campaña no lo votaba nadie”, resaltó Ceballos.En otro orden, el dirigente de La Matanza afirmó que “en la provincia de Buenos Aires no se va a solucionar el problema de la inseguridad mientras los ministros del área sean los intendentes del conurbano, como Rico, Othacehé, o actualmente, Granados, cuyo único mérito -sostuvo- es la experiencia que tienen en compartir los negocios con los uniformados en sus distritos”.
A la vez, Ceballos apuntó al gobernador Daniel Scioli y recalcó: “Quiere ser Presidente y dice que tiene experiencia de gestión, lo que no dice es que tipo de experiencia, la de las escuelas destruidas y niños sin clases, la de la provincia más rica del país con la mayor cantidad de pobres”. Durante el acto se presentó el grupo de cumbia Tinta Roja y también hizo uso de la palabra Silvia Saravia, precandidata a legisladora bonaerense de Libres del Sur. Por el momento sin la líder del GEN, Margarita Stolbizer, se anotan para competir en las PASO los radicales Facundo Manes, Miguel Bazze y Héctor “Cachi” Gutiérrez; los dirigentes del GEN Gerardo Milman, Jaime Linares y Omar Duclos; el referente de la Coalición Cívica Héctor “Toty” Flores; y el de Proyecto Sur Mario Cafiero. Como se ve, el escenario bonaerense da para todos los gustos, aunque hoy esté bajo el marco de cielos tormentosos, propios de las roscas preelectorales.
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