El gobernador arengó a un ejército de más de 300 funcionarios en el SUM de la Gobernación. Destacó el espíritu del Papa Francisco, de Sabella y Marcherano y repartió palos para Massa y Macri, a quienes calificó de “bomberos piromaníacos sin propuestas”.
Aunque no se lo diga en voz alta, tuvo todas las características de un lanzamiento de campaña. De cara a lo que será el camino electoral para las presidenciales de 2015, Daniel Scioli colmó el SUM de la Gobernación, en la calle 6 entre 51 y 53, con más de 300 funcionarios de su Gobierno que dieron el presente, a los que arengó con fervor y buscó motivar con una impronta netamente futbolera. El mandatario bonaerense también formuló críticas hacia sus adversarios políticos, calificando a Sergio Massa y Mauricio Macri, de ” bomberos piromaníacos sin propuestas”.
El marco fue el SUM decorado con los colores de Argentina, combinados con el clásico naranja de Scioli y acompañados por el slogan “la ola naranja”, en gorros, banderas, cuelos polares y hasta mazos de cartas. De esta manera, Scioli agasajó a su militancia con cafe y mediaslunas.
Cuando se hizo silencio, frente a su tropa, Scioli anheló un futuro acto en el Estadio Único, y se reconoció como un hombre que “con las lanchas” buscó “llevar el país a lo más alto”. “Ahora tengo nuevos sueños”, relató, y habló de “tomar la posta y gobernar la Argentina”.
Añadió además en otra parte de su arenga que “en la ultima elección legislativa tuvimos la voluntad popular que se expresó en las urnas” y reconoció haber sentido que “tenía una responsabilidad aún mayor”. Fue por eso que pidió que “los ministerios y las empresas de la provincia instalen la gestión, ya que necesitamos que cada uno de ustedes se transforme en un potencial candidato para difundir todas estas cosas”.
PARA MASSA
El momento de mayores aplausos fue cuando el gobernador disparó un mensaje para Massa: “Que un dirigente no se deje llevar por una tormenta de verano”, tras lo cual remarcó que él tiene “convicciones” y en la “especialidad” que atribuyó a su gobierno “descomprimir conflictos”.
Si entramos en el análisis de la entretela del acto, el objetivo fundamental fue el de bajar línea a cada uno de los responsables de los ministerios, para que “ esos ámbitos y las empresas de la provincia instalen la gestión”. Una vez más, Scioli exigió que se difunda el trabajo que se hace en la provincia para que la gente se incline a su favor. “Necesitamos que cada uno de ustedes se transforme en un potencial candidato para difundir todas estas cosas”, pidió.
EL PAPA Y SABELLA
Scioli además se refirió al Papa Francisco y a Alejandro Sabella, como dos ejemplos. Fue tal la emoción que expresaron para con el DT de la Selección en el Mundial que llegaron a comparar al peronismo conJavier Mascherano. Incluso también hablaron del Gobernador como si fuese el volante central argentino. “El año que viene te convertís en héroe”, le dijo el presidente del Banco Provincia Gustavo Marangoni al mandatario provincial, citando las palabras del jugador del Barcelona al arquero Romero previo a la definición por penales contra Holanda.
Scioli se hizo un espacio también para criticar a Mauricio Macri, el líder del PRO. Allí disparó que: “Algunos políticos son bomberos piromaníacos”, lanzó, criticándolo por anticipar malas noticias para el país y decir cómo solucionar los problemas de antemano.
Luego, fueron desfilando por un escenario decorado con naranja por todos lados, cada uno de sus ministros. Todos tuvieron palabras de elogio para el gobernador. Uno de los que habló fue su “copiloto en la Provincia”, tal como lo presentó, Alberto Pérez, y después fue el turno de Marangoni, Casal, Aparicio, Carlotto, Telerman y demás.
UN PORTAAVIONES
Ya con la fiebre del Mundial terminada, Scioli detalló que la agenda de campaña se llevará a cabo durante la semana en la provincia de Buenos Aires y los fines de semana en el interior del país. Así, anticipó su próximo viaje a la provincia de Tucumán. Definió a la provincia como “un gran portaaviones” y se despidió.
Tras Scioli, hablaron algunos de sus ministros, que llevaron a cabo un repaso de gestión. Así, Alberto Pérez ensayó una comparación entre la militancia sciolista y el mensaje de El Eternauta, fuente de inspiración de La Cámpora, por ejemplo, y exhortó al funcionario “que no esté convencido” a “dar un paso al costado”.
“Un funcionario tiene que ser un militante”, dijo Pérez, tras lo cual subrayó que “la provincia nunca fue un problema para el país”. Imbuido por la tónica futbolera, Marangoni se sintió Mascherano por un segundo y le prodigó a Scioli “el año que viene te convertís en héroe, el año que viene te convertís en el presidente de los argentinos”. Más medido, Casal destacó a su jefe como “el mayor constructor de consensos”.
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